"LILIPUT"
El viernes 15 pudimos visitar la exposición de Isabel Gómez llamada "LILIPUT", alojada en el Centro Cultural Galileo.
Dicha exposición giraba en torno a una idea:Los viajes de Gulliver, en el que las escenas eran representadas por una figura femenina en lugar de una masculina, como en el libro. Tengo que decir que hasta que no me acerqué a una cita escrita en la pared no encontré, ni pude imaginar, ninguna conexión con el libro.
Pero tuvimos la gran suerte de contar con la presencia de la artista, Isabel Gómez, que añadió otro significado a la unidad que los cuadros formaban. Cada uno de ellos representaba una etapa distinta por las que Isabel Gómez pasó durante la enfermedad y pérdida de su compañero de vida. Además María Jesús nos explicó cómo estaban colocados los cuadros con qué finalidad,etc. Hablamos del choque de formatos, que la distancia entre los cuadros no es algo aleatorio y sobre cómo conducir la mirada del visitante.
Bajo mi punto de vista, la exposición, en un primer momento no me impresionó- Lo que más me llamó la atención fue el tratamiento del color y la composición, las distintas técnicas que se mezclaron y la utilización, incluso, de telas para dar textura a los cuadros. Bien es cierto que hubo cuadros que me atraían más a los que dediqué bastante tiempo observando, pero colo he dicho, nada fuera de lo normal en una visita a una exposición.
Mi punto de vista cambió cuando supimos la historia que escondía detrás y los pequeños detalles como la crítica a la sociedad con la serie de dibujos en tinta de tacones de colores, el simbolismo de mudar los sentimientos con la piel de serpiente, etc.
Podría decirse que visité la exposición dos veces, una con los ojos cerrados y otra con los ojos abiertos. En la "segunda visita" intenté buscar sentido a la relación que tendría el cuadro con lo que pudo llegar a sentir la autora y me quedé con ganas de conocer la "habitación de atrás" de la exposición, la forma en la que se arrancó una idea a partir de un vestido y un libro.
Sin duda fue una experiencia muy distinta que da comienzo a una larga lista de exposiciones que nos quedan por visitar, y desde el viernes, hay una frase de la artista que me acompaña: Lo inacabado tiene una intención, a veces el propio cuadro pide parar.
Dicha exposición giraba en torno a una idea:Los viajes de Gulliver, en el que las escenas eran representadas por una figura femenina en lugar de una masculina, como en el libro. Tengo que decir que hasta que no me acerqué a una cita escrita en la pared no encontré, ni pude imaginar, ninguna conexión con el libro.
Pero tuvimos la gran suerte de contar con la presencia de la artista, Isabel Gómez, que añadió otro significado a la unidad que los cuadros formaban. Cada uno de ellos representaba una etapa distinta por las que Isabel Gómez pasó durante la enfermedad y pérdida de su compañero de vida. Además María Jesús nos explicó cómo estaban colocados los cuadros con qué finalidad,etc. Hablamos del choque de formatos, que la distancia entre los cuadros no es algo aleatorio y sobre cómo conducir la mirada del visitante.
Bajo mi punto de vista, la exposición, en un primer momento no me impresionó- Lo que más me llamó la atención fue el tratamiento del color y la composición, las distintas técnicas que se mezclaron y la utilización, incluso, de telas para dar textura a los cuadros. Bien es cierto que hubo cuadros que me atraían más a los que dediqué bastante tiempo observando, pero colo he dicho, nada fuera de lo normal en una visita a una exposición.
Mi punto de vista cambió cuando supimos la historia que escondía detrás y los pequeños detalles como la crítica a la sociedad con la serie de dibujos en tinta de tacones de colores, el simbolismo de mudar los sentimientos con la piel de serpiente, etc.
Podría decirse que visité la exposición dos veces, una con los ojos cerrados y otra con los ojos abiertos. En la "segunda visita" intenté buscar sentido a la relación que tendría el cuadro con lo que pudo llegar a sentir la autora y me quedé con ganas de conocer la "habitación de atrás" de la exposición, la forma en la que se arrancó una idea a partir de un vestido y un libro.
Sin duda fue una experiencia muy distinta que da comienzo a una larga lista de exposiciones que nos quedan por visitar, y desde el viernes, hay una frase de la artista que me acompaña: Lo inacabado tiene una intención, a veces el propio cuadro pide parar.
Obra de Isabel Gomez. Foto tomada por Eva Gutiérrez
Obra de Isabel Gomez. Foto tomada por Eva Gutiérrez
Obra de Isabel Gomez. Foto tomada por Eva Gutiérrez
Obra de Isabel Gomez. Foto tomada por Eva Gutiérrez
Sala de la exposición. Foto tomada por Eva Gutiérrez
Comentarios
Publicar un comentario